PEPITO CEBOLLA
Hoy os presento uno de los últimos cuentos escritos por Sandra Alonso (en breve os presentaré otro más). Hablar de Sandra es hablar de una persona con verdadera pasión por los cuentos infantiles, incluso antes de que tuvieran el auge que tienen en la actualidad. Una persona enamorada de las historias para pequeños y no tan pequeños que, además de ser maestra, hace unos años decidió dar el paso de publicar su primera obra y recientemente se ha atrevido también a montar su propia librería.
El de hoy es su sexto álbum en solitario, tras habernos hablado anteriormente de abrazos y duelo, de números y emociones, de igualdad, de brillar y de pinzas de tender.
"Pepito cebolla" nos llega de la mano de La Maleta ediciones, una editorial muy especial para mí, y lo hace con Beatriz Dapena y Álex Meléndez a los colores (de ellos ya hablé en "Pequeña monstruo"), lo que redunda más en la hermosura del álbum.
SINOPSIS
"Mi nombre es Pepito, aunque creo que debería llamarme Pepito Cebolla".
Así comienza el texto de este álbum, con la presentación de su personaje principal y una invitación a conocer el motivo por el que piensa que debería llamarse de ese modo.
Y no es porque huela mal, en absoluto. Es porque siempre va vestido con más capas que una cebolla.
Su familia cree que si Pepito va siempre abrigado, nunca pillará un resfriado. Por eso lo visten de este modo desde que era pequeño, independientemente de la estación del año en que se encuentren y de la temperatura del exterior.
Su padre, su madre, su tío e incluso su maestra le aconsejan que se pongan distintas prendas: que si un jersey, que si una camiseta interior. Hasta el panadero y la quiosquera le insisten en que se abrigue un poco mejor.
Y claro, con tanta capa, Pepito se siente apretado, limitado y sin poder hacer muchas cosas que le gustaría. ¡Qué tortura! ¡Pobre Pepito! ¡Así no hay quien se mueva!
Así que un día, ni corto ni perezoso, Pepito decidió ponerle fin a esa situación y despojarse de toda su ropa. E incluso se atrevió a revolcarse en la nieve. Era tan bonita la sensación de libertad que percibía que no lo pudo evitar.
¿Qué creéis que pasará cuando su madre, su padre, su abuela, su tío, su maestra, el panadero y todos los demás cuando lo vean así? ¿Le permitirán liberarse de sus ataduras? Pues seréis vosotros los que lo tendréis que descubrir.
OPINIÓN PERSONAL
¿Quién no se ha sentido Pepito alguna vez? ¿Quién no se ha puesto (o ha puesto a otro) tantas capas que no se podía mover? Una temática original y cotidiana que favorece la identificación con el personaje principal contada a través de una trama que mantiene atento al lector. Imposible, tras la lectura, no acordarse de nuestras madres y nuestras abuelas y todas esas personas que siempre pensaban que estábamos demasiado poco abrigados.
Un texto conciso (no necesita más) con toques divertidos y un tanto irónicos, narrado en primera persona, con la voz del propio Pepito.
Un álbum bofetada que ayuda a pequeños y mayores a entender cómo la sobreprotección (manifestada no sólo por la cantidad de ropa que lleva Pepito) puede limitar la libertad del que la sufre y cómo todos necesitamos sentir en nuestra piel la libertad.
Ilustrado en delicados tonos pasteles, primando siempre la sencillez y la calidez, Bea y Álex han creado a un personaje inocente y extrañable que, con capas o sin ellas, enamora al lector. Una perfecta combinación de texto e ilustración.
En mi opinión, la mezcla de sencillez, humor, ironía, calidez, cotidianeidad e ilustración lo hacen un álbum altamente recomendable que nadie podrá leer sin que aparezca una sonrisa en su cara.
ACTIVIDADES
La historia de Pepito nos permite conocer las prendas de ropa y profundizar en aquellas que son más adecuadas en función de la estación del año.
En la web podemos encontrar diverso material para llevar a cabo una actividad en este sentido. A mí me ha gustado especialmente el que veis en imagen a continuación, elaborado por Activitea, y al que podéis para descarga gratuita clicando en la imagen.
Además, dada su temática, este libro nos ofrece una gran oportunidad para trabajar los estilos educativos y analizar las consecuencias de la aplicación de la sobreprotección (especialmente recomendado para formación de grupos de padres).
Os dejo un breve vídeo donde la propia Sandra nos habla de su libro.
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