MI ESPACIO PROPIO


Texto: Pippa Goodhart
Ilustración: Rebecca Craner
Editorial: SM
Año de publicación: 2017

El arte de la literatura infantil implica, en muchas ocasiones, poner en palabras e ilustraciones conceptos abstractos que resultan más difíciles de entender de otro modo. Y ése es el arte que reside en el álbum que os presento hoy. 

Escrito por Pippa Goodhart, ilustrado por Rebecca Craner y publicado por SM España, este título llegó a mí por casualidad y fue comprado a ciegas (cosa que no hago normalmente, porque me encargo de conocer en profundidad un libro antes de comprarlo). Lo bueno es que no había expectativas depositadas en él. Todo lo que me aportara, bueno sería. Pero me ha aportado mucho más de lo que pensaba por un precio módico. 

Sin más, os dejo con "Mi espacio propio". 


SINOPSIS

Esta historia comienza en un escenario lleno de conejos. Mientras uno estornuda, otros tocan diferentes instrumentos, otros hablan y otros ríen a carcajadas. Pero uno de ellos, nuestro protagonista, tiene un firme objetivo: leer su libro. Pero claro, para eso necesita un poco de silencio. 

Aunque los manda a callar, no resulta efectivo, así que decide buscar un espacio sólo para él, delimitándolo claramente con una raya que NADIE podrá sobrepasar.

En su espacio propio el conejito por fin lee su libro. Disfruta tanto de la historia que se sumerge en mundos fantásticos evadiéndose del mundo exterior. 

Pero, al cabo de un rato, escucha música, huele algo delicioso y percibe las risas que se encuentran al otro lado de su raya. Y empieza a añorar. Se siente solo. 

En su espacio tiene cosas buenas, pero le falta el cariño de mamá, una taza de chocolate caliente y poder jugar con sus amigos. 

De repente, otro conejito (quien le persigue a lo largo de las páginas del cuento, cual hermano pesado pequeño) traspasa la raya e invade el espacio de nuestro protagonista. Sorprendido, éste se da cuenta que la raya no era intraspasable como él creía. 

¿Decidirá entonces salir de su espacio e interactuar con los demás? ¿Deberá renunciar el conejo a su espacio personal? Sin hacer spoiler, solo digo que en el equilibrio está el éxito y que el espacio propio es importante incluso entre una multitud. 



OPINIÓN PERSONAL

Estar sólo y estar acompañado. La necesidad de disponer de un espacio y un tiempo propios y de espacio y tiempo compartido. ¿No creéis que es un tema súper importante de trabajar con los peques? ¿Os habéis visto alguna vez en una situación en la que vosotros demandabais ese espacio propio o veíais cómo el espacio de otro quedaba invadido (por ejemplo, en la relación entre hermanos o iguales)?.

Sin duda, es una situación cotidiana que, en ocasiones, es difícil de explicar por la abstracción de la temática (y porque creemos que la necesidad de disponer de un espacio propio no es tan importante). 

De un modo sencillo, con poco texto, con mucha carga de las ilustraciones y con tan sólo una raya que separa ambas situaciones, este libro consigue hacer llenar al lector su propósito de un modo sublime. Y consigue, además, combinar dos necesidades: la de estar solo y la de estar acompañado. 

Sin recargar, con espacios en blanco a pesar de estar todo lleno y con una definida paleta de colores, las ilustraciones, a veces sin texto, complementan la historia a la perfección. 

Otro aspecto que me ha gustado muchísimo es la edición. El lomo es de tela y portada y contraportada utilizan un papel mate que parece texturizado. Además, el título del libro y la figura del personaje son destacadas en la portada con barniz UVI.

Este libro está recomendado por la editorial a partir de los 3 años de edad y, aunque se lee fácilmente y resulta divertido, hay cierta carga de ironía y de abstracción, por lo que yo lo recomendaría para algo más de edad (5-6 años tal vez). 


ACTIVIDAD

Uno de los aspectos fundamentales que se pueden trabajar a través de este cuento es el respeto necesario para que la convivencia resulte adecuada. En este sentido, tras su lectura, podemos definir qué actividades nos gusta hacer en solitario, sin la participación ni la molestia de los demás, y cuáles nos gusta hacer acompañados. Igualmente, podemos hablar de las emociones que se generan en nosotros cuando nos sentimos invadidos u diferentes estrategias asertivas de defender nuestra necesidad de espacio propio. 

Otra propuesta más vivencial y más útil, por tanto, desde más temprana edad es, antes de leer el cuento, dar a los niños un trozo de cuerda y decirles que delimiten su espacio propio. En SU espacio, podemos hablar de las cosas que pueden hacer en él y las que no pueden hacer (por estar alejados de los demás). Finalmente, se llegará a la conclusión de que ambas situaciones son necesarias.


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