LA ABEJA DE MÁS

Texto: Andrés Pi Andreu

Ilustración: Kim Amate

Editorial: Takatuka

Año de publicación: 2011 en España

Los libros nos divierten. Los libros nos enseñan. Los libros nos ayudan a enfrentarnos a situaciones complejas. Pero, además, hay libros que nos hacen reflexionar, y mucho, sobre nuestros valores, sobre nuestras creencias, de esos que lees y te dejan un poso. 

Así es el álbum que os presento hoy. Cuidado, muy bien hilado y con una temática súper interesante de fondo: la convivencia, la solidaridad, la tolerancia y la unión entre personas. 

"La abeja de más" está escrito por Andrés Pi Andreu, ilustrado por Kim Amate y publicado por la editorial Takatuka. Un libro que conocí por casualidad en las redes (gracias a Vero, de @quiero_este_cuento, otra amante de esta locura, como yo) y que tuve la suerte de encontrar en la biblioteca, escondido pero con un brillo especial que ya se intuía desde la portada.

SINOPSIS

En un panal de abejas de algún desconocido lugar habitaban los miembros de una colmena. Últimamente esas abejas habían notado que estaban más apretadas que nunca y que el espacio entre ellas escaseaba. 

Se ve que entre ellas había una exquisita organización, así que, ante tal hecho decidieron iniciar una investigación. Sin duda, las mejores para hacerlo eran 3 abejas arquitectas que de espacio y distribución sabían un montón. 

Después de aquel arduo trabajo, las abejas se volvieron a reunir para escuchar la conclusión a la que habían llegado las expertas: el espacio para guardar la miel era suficiente, pero había menos dormitorios que abejas, lo cual significaba que...  HABÍA UNA ABEJA DE MÁS. Y todas enmudecieron.

¿Cómo era posible que una abeja se hubiese infiltrado entre ellas y nadie se hubiese dado cuenta? Las abejas empezaron entonces a elucubrar. -¡Será extranjera! ¡Será inmigrante! ¡Se está comiendo nuestra miel! ¡Traerá enfermedades! ¡Nos quitará el trabajo! -se escuchó en la colmena. 

Todos querían saber quién era esa abeja, pero ésta no se manifestaba. Así que no les quedó otra opción que inventar varias estrategias alocadas para poder descubrir el misterio. Una propuso pasarlas a todas por un detector de mentiras. Otra pensó en confeccionar pasaportes y certificados de nacimiento originales. E incluso alguna pensó en enumerar a todas las abejas. 

Pero ni siquiera así lograron dar con la solución. Menos mal que ya se sabe que, en cada colmena, hay una abeja reina que es poderosa y lista, lo suficiente como para calmar aquel revuelo. La abeja, decidida, fue trasladando preguntas al grupo que escuchaba con atención: ¿Acaso no son iguales todas las abejas? ¿Acaso no hacen lo mismo y se alimentan de lo mismo? ¿Acaso no hay más cosas que nos asemejan a los demás de las que hacen que seamos diferentes? ¿Y qué pasa si lo somos?. Siiiiiiiiii, contestaban todas al unísono. 

Si todas son iguales, si todas son trabajadoras, si todas están allí para lo mismo, ¿no será que lo que falta es una habitación? ¿O es que acaso todo había sido un error de cálculo?

OPINIÓN PERSONAL

¡Qué difícil es hablar de ciertas temáticas y hacerlo, además, de un modo deductivo y con un punto de humor! ¡Qué difícil es dejar que sean los lectores quienes lleguen a sus propias conclusiones, sin dirigirlos! Pues así es "La abeja de más". Una historia que, de manera sublime, nos trae una bonita metáfora sobre la exclusión social de los inmigrantes, los prejuicios que existen sobre ellos y la convivencia. 

Una trama muy bien desarrollada, lenta al principio, histérica e inquietante en medio y dulce y reconfortante al final, que mantiene enganchado al lector a través de sus páginas. Las abejas pierden la cordura y pronto buscan un culpable que nunca existió, derrochando ignorancia, rumores y acusaciones. 

Unas ilustraciones exageradas cargadas de detalles que desprenden fantásticamente bien la sensación de apretujamiento en el panal, excepto en la ilustración final, en la que se respira relajación. No os perdáis las imágenes y en ellas descubriréis mucho contenido que aporta más valor a la historia: una abeja que está haciendo un curso de vidente, la comparación con las avispas, los carteles, el ritmo diario de trabajo en la colmena, un extraño personaje barbudo que se repite en casi todas las ilustraciones... Sin duda, un libro para leer y observar. 

Te invito a sumergirte al completo en esta historia que nos habla de prejuicios, de tolerancia, de juzgar y, sobre todo, de que en el mundo, como en el panal, no hay nadie de más: sólo es cuestión de organización. Porque aquí hay sitio para todos. 

ACTIVIDAD 

Además de las interesantes reflexiones que pueden surgir tras su lectura, especialmente con niños a partir de 7-8, para los más pequeños he pensado trabajar conceptos matemáticos de sumas y restas con temática "abejas" de fondo para que así, cuando contemos, tengamos siempre claro que no falta ni sobra nadie.

El material ha sido creado por @eldiariodemiaula, que lo cede voluntaria y gratuitamente para su uso. Consiste en contar las rayas que tiene la abeja que se presente en cada ocasión y representar el número resultante de diferentes maneras: el número, la palabra en mayúscula y en minúscula, la representación numérica o la suma. El niño deberá encontrar cuatro maneras diferentes, una por cada ala, de indicar el número de rayas que observa. 

Puedes acceder al material haciendo click en la siguiente imagen. 

Si queréis ver el cuento al completo, podéis hacerlo a través de este vídeo: