LÁGRIMAS BAJO LA CAMA

Autora: Ana Meilán

Ilustradora: Marta Mayo

Autoeditado

Hoy traigo una joya de álbum escrito por Ana Meilán e ilustrado magníficamente por Marta Mayo. Para mí, un MANUAL PRÁCTICO DE EDUCACIÓN EMOCIONAL, tanto para pequeños como para mayores. Menuda lección en unas pocas palabras! Un libro que ya va por su cuarta edición. Por algo será. Fue el primer álbum ilustrado que escribió esta autora que ya atesora grandes obras en su haber.


SINOPSIS

Cuando Simón era pequeño, todo el mundo decía que era un llorón. Si tenía hambre, lloraba. Si le picaba un pié, lloraba. Si quería dormir, lloraba. Su padre, su abuela, su madre, su profesora siempre le decían: ¡Simón, eres un llorón!

Y Simón, cansado de escuchar aquella frase, tomó una decisión: ya no lloraría nunca más delante de nadie, y así podría ser un hombre hecho y derecho, y no escucharía jamás esa pesada frase. Se le ocurrió una idea: guardaría cada una de las lágrimas que brotasen de su cara en un bote.

Pero no sólo iba a guardar sus lágrimas, sino las de todo el mundo. Llevaba siempre un pañuelo en el bolsillo y con él limpiaba las lágrimas que se encontraba, hasta que llegaba a casa y las guardaba debajo de su cama.

Y fueron tantas las lágrimas que recogió, de pequeños y mayores, que llenó muchos botes, los suficientes para conseguir que ya nadie llorara.

Pero... ¿Qué iba a pasar ahora que el mundo se quedaba sin lágrimas?¿Cómo sabríamos qué le pasa a la gente? Simón se dará cuenta de su error e intentará corregirlo descubriendo, además, que no siempre las lágrimas son de tristeza, sino que también pueden ser de felicidad.

OPINIÓN PERSONAL

En una sociedad o una cultura en la que la expresión de emociones a través de las lágrimas parece estar mal vista, cuentos como éste nos hacen recordar la importancia de expresarnos, la utilidad que tienen las emociones (todas, incluso las mal llamadas emociones negativas) y la importancia del lenguaje que utilizamos al referirnos a ellas. 

Simón no es un llorón. Es un niño, como cualquier otro, que manifiesta una necesidad. ¿Por qué empeñarse en reprimirla? ¿Por qué aún tenemos que seguir escuchando que los hombres no lloran, o que llorar es de débiles, o que, para ser un hombre hecho y derecho no se puede mostrar miedo o tristeza? ¿Por qué sigue resultando tan incómodo ver llorar a los demás? ¿No es más sencillo acompañar al otro en su expresión? 

Un maravilloso cuento en el que, además, todos lloran. Grandes y pequeños. Porque los mayores también lloran. 

¿Tienen normalizado los niños que los adultos también lloran? ¿O intentamos reprimirnos tanto delante de ellos que se asustan o se sorprenden si nos ven? ¿No estamos así transmitiendo que llorar es malo, vergonzoso, señal de debilidad? Y así el pez que se muerde la cola: enseñamos una cosa y actuamos con otra. Gracias, Ana, por tratar de inculcarles a nuestros niños la importancia de la expresión de emociones de una manera tan sublime.

Me gusta mucho el cuento también por sus ilustraciones coeducativas. Papá cambia el pañal del bebé, mamá arregla el lavabo. Escenas cotidianas que podrían pasar inadvertidas pero que están transmitiendo mensajes positivos a sus lectores. 

Como siempre, los detalles destacan en los envíos que la autora realiza de sus cuentos. Junto con éste, nos llega un pequeño bote con lágrimas de llorón, un marcapáginas, una pegatina, dos dibujos para colorear y dos postales con preciosas frases.

Además, en la web de www.entrenubesycuentos.com, la autora pone a disposición nuestra más materiales:

🔹 Mandalas de lágrimas para colorear (4 en total) como las que aparecen en las siguientes imágenes cortesía de Pokape. 

🔹 Carnet de valiente, que se le entrega a aquellas personas que pertenecen al club "Yo me siento así" por expresar sus emociones.

🔹 Cubo de las emociones, un cubo con 6 lados donde aparece la cara de Simón manifestando una emoción.

ACTIVIDADES:

✔️ EL JUEGO DEL CUBO DE LAS EMOCIONES. Tras recortar y pegar la plantilla que nos proporciona la autora, podemos jugar según la siguiente propuesta. El juego consiste en tirar el dado por turnos, adivinar la emoción que está representando Simón y contar una ocasión en que hayas sentido lo mismo. El jugador que no acierte la emoción o no sepa poner un ejemplo de ella, queda eliminado.

✔️ BOTE DE LÁGRIMAS. Los niños suelen llorar con facilidad, pero cuando nos hacemos mayores, nos cuesta más. Quizás nos da vergüenza que nos vean llorando, quizás pensamos que llorar no está bien, quizás porque queremos ser "hombres y mujeres hechos y derechos, ...". Hemos llenado un bote con lágrimas azules de papel. En algunas de ellas he escrito diferentes motivos por los que lloran las personas. Las demás las he dejado sin escribir para que sea el niño quien reflexione acerca de otros motivos por los que pequeños y mayores pueden llorar. Cuando el niño crea que una persona debería llorar, buscará en su bote la lágrima correspondiente y se la dará a la persona. Y, si no la tiene, debe escribirla. Es su forma de decirle que puede y debe llorar, porque seguro que eso le hará bien. 

También podemos, sin hacer uso del bote, llevar a cabo una investigación entre nuestros familiares y amigos y descubrir cuáles son los motivos principales por los que lloran. Posteriormente, los podemos escribir en trozos de papel de colores (o azules) en forma de lágrimas. De este modo, los niños descubrirán que todo el mundo llora y lo hace por diferentes motivos, naturalizado así la expresión de las lágrimas.

✔️En casa descubrimos hace poco y por casualidad que en todas las páginas del cuento hay un elemento que se repite: el perro de peluche de Simón. Algunas veces está escondido, y otras no tanto. Podemos buscar a encontrarlo, a modo "busca y encuentra". Otra genialidad más del cuento. 

En la web de www.entrenubesycuentos.com podéis encontrar otras reseñas realizadas sobre este cuento con magníficas propuestas de actividades. 

Amaia del Campo, desde Cuentos en la Nube, pone voz y diseña este videocuento de Simón. 

Os dejo el vídeo de una canción sobre el cuento: